Tratamiento para la sonrisa gingival con Botox
La sonrisa gingival corresponde a la exposición exagerada de encía cuando sonreímos.
Se considera que una sonrisa es “gingival” cuando se exponen más de 3 mm de encía, pudiendo haber casos en las que se superan con creces estos 3 mm, y que por supuesto, a mayor exposición, más afectada se ve la estética de la sonrisa y el autoestima del paciente.
Una bella sonrisa considera generalmente dientes blancos y alineados, y es en estos puntos donde se a enfocado la odontología tradicional, sugiriendo a los pacientes blanqueamientos dentales, ortodoncia de todos los tipos, carillas para mejorar la forma y color de los dientes, diseños de sonrisa, entre otras cosas.
Pero son muy pocos los profesionales que valoran la encía de los pacientes y la dinámica de la actividad muscular.
Cuando un paciente acude mi consulta, antes de sentarlo en el sillón dental, me tomo unos minutos para conversar con el o ella, y es en ese momento donde se inicia el exámen clínico. Con preguntas claves evalúo la sonrisa espontánea, evalúo la cantidad de encía que muestran al conversar, al sonreír tímidamente o al reír de formar explosiva.
Muchas veces los pacientes tienen sumamente claro su problema y saben reconocer en el espejo cuando y con qué gesto se genera la mayor exposición de tejido gingival, pero otros pacientes, no lo saben aun, y simplemente lo descubren cuando uno se los enseña. La mayoría de las veces los pacientes llegan consultando cirugía gingival para “alargar” la corona dentaria (gingivectomía) o “agrandar” los dientes con carillas, no dándose cuenta que problema no es de los dientes o de sus encías, si no que se debe a la fuerza muscular del músculo elevador del labio superior.
Por supuesto que existen pacientes que tienen una combinación de problemas asociados a la estética de su sonrisa, pudiendo darse casos en los que haya que hacer cirugía gingival (recorte de encías) asociado a tratamiento de sonrisa gingival con bótox, o casos más severos en los que sea necesario hacer una cirugía maxilofacial más compleja. Todo va a depender del caso del paciente, y para determinar el tipo de tratamiento más adecuado para cada caso se requiere siempre:
Una evaluación Clínica de 30 minutos en donde se valora la dinámica muscular, el tamaño del labio superior en reposo, el reborde óseo alveolar, los dientes, la salud de la encía, etc.
Si el caso lo requiere, un estudio de Cone Beam Bimaxilar con separación de tejidos blandos (para ver si la encía está invadiendo la corona dentaria).
Con estas dos herramientas es posible ofrecer al paciente el mejor tratamiento basado en un diagnóstico completo.
Cabe destacar que a grandes rasgos, un paciente ideal para el tratamiento de Sonrisa Gingival con botox es un paciente que:
- Presenta cierre bucal normal (no tiene labio superior corto o maxilar aumentado)
- Muestra más de 3 mm de encía cuando sonríe.
¿En que consiste el tratamiento para la Sonrisa gingival con bótox?
Consiste en 2 sesiones clínicas en donde se infiltran los músculos elevadores del labio superior con toxina botulínica tipo A.
Durante la primera sesión se realiza la primera infiltración, luego se espera 10 a 14 días y se reevalúa al paciente, si el paciente está conforme con su resultado, no se vuelve a infiltrar botox, pero si el paciente y el doctor consideran que es prudente realizar una segunda aplicación, esta se realiza sin costo adicional y se vuelve a esperar 10 a 14 días para valorar los resultados.
El resultado final obtenido tendrá una duración máxima de 6 meses, pasado estos 6 meses el músculo elevador del labio superior recupera su función y será necesario repetir el tratamiento si es que el paciente así lo desea.
